domingo, 24 de mayo de 2009

EM, de Piura, Perú.

Hace un par de años, por circunstancias que hoy ya no vienen al caso, conocí a un chico, uno de 70 años (la verdad, no sé su edad, siempre he hablado de él como "mi amigo de 70 años" pero, pensándolo bien, creo que se acerca más a los 80).

Un señor de esos que no encuentras fácilmente, un señor maduro con alma de niño, lleno de anécdotas como viajes en barco, persiguiendo un amor por todo España... y de ocurrencias como dejar un taxi con la puerta abierta (maletín personal con cosas importantes dentro) sólo por venir corriendo para despedirse de nosotros al darse cuenta de que ya se estaba yendo y aún no lo había hecho.

Algo así como un abuelito al que, precisamente, por no ser de mi familia, podía hablarle abiertamente de amores, de dudas existenciales, de penas, de problemas familiares, de cambios, de sueños, de planes... un amigo con toda la experiencia del mundo, siempre dispuesto a escucharme, a darme consejos, a tomar un desayunito conmigo en La Baguette para ponernos al día.

Perdón por dejarte de lado EM, perdón por no darme un tiempo para ti. Perdón porque... porque no sé qué decir. Hoy me llamaste para despedirte y mañana te iré a ver y no sé qué decir. Te voy a ver y, la verdad, no quiero verte así. Siempre serás mi amigo, así ya no estés.

lunes, 11 de mayo de 2009

Unsent (Parte I)

Esta canción de Alanis me pareció genial desde que la escuché, asi que bien copiona yo, haré lo mismo que ella pero en versión un poquito más extensa (como ven, tendrá Parte II). Porque es divertido recordar, y además de repente haciendo esta mini antología pueda encontrar el común denominador a mis relaciones... aunque lo dudo muchísimo :P



Querido D: La verdad no recuerdo cómo así me empezaste a gustar. Supongo que una niña de 9 años asocia amor con compañerismo. Porque eso es lo que recuerdo: eras divertido y eras uno de los pocos “hombres” con los que podía conversar. Caminamos juntos unas 3 vueltas al patio hasta que me preguntaste si quería ser tu novia. Y yo no sabía bien qué iba a implicar eso, solo tenía algo bien claro: nada de besos, eso para cuando sea mucho MUCHO más grande. Recuerdo que al sonar la campana de salida, venías siempre y me ayudabas a guardar los cuadernos y libros en la mochila. Ahora eres felizmente gay y que quede claro que nunca me sentí responsable de eso.


Querido L: Todas morían por ti. Eras el chico nuevo del salón, les llevabas a todo el resto unas 3 cabezas de diferencia en estatura, y tenías una lindísima sonrisa. Definitivamente la pubertad te estaba llegando antes que al resto, pero como eras asi de churro, eras igual de… bruto. No hablabas mucho, te jalaban en casi todos los cursos, eras tosco y falto de tino. No entiendo hasta ahora cómo fuimos “enamorados”. Yo solo quería que me plantes un beso (que nunca llego, por cierto).


Querido A: Me hacías matar de risa. Te tardaste casi una hora en “declararte” haciéndome dibujos y signos de indirectas en una hoja de laboratorio de ciencias. Fuiste mi primer beso. Mi primer, extenso y salivoso beso. Remarco esto ya que a raíz de los aproximadamente 40 minutos intercambiando fluidos, me contagiaste de una gripe espantosa. Moría de fiebre en casa y era feliz. Al lado mío parecías mi hijo, nunca me atreví a andar de la mano contigo, y preferíamos sentirnos novios en cualquier sillón, bien sentaditos.


Querido D.L.: Fuiste el chico que me quitó el sueño casi toda mi vida durante secundaria. Fuiste quien me rompió el corazón un poquito por primera vez, y me enseñaste a aparentar ser digna y no mostrar las lágrimas. Luego esperaste sigiloso, mirándome de refilón desde la esquina del salón, y terminaste "cayéndome" (ja!) en el Select de la resi. Te dejé esperando una semana por la respuesta (aparentando ser digna, nuevamente), y te dí el sí en una fiesta mientras tocaban Hole in my soul. Fuiste el primero a quien le sentí los latidos palpitando sobre mi pecho. Fuiste el primero al que soñé demasiadas noches. Fuiste quien me sacaba de cuadro totalmente cada año, cuando te daba la locura de pronto por abrazarme, acariciarme sutilmente o susurrarme al oído. Fuiste mi primer deseo carnal. Fuiste muchísimo. Creo que el estilo de guitarrista old school, de perfil bajo, me resultaba eternamente irresistible. Te veo ahora cargando a tu preciosa hija en la playa, siendo el hombre que creo nunca imaginé, y asi no conversemos mucho (en realidad, siempre fuiste de pocas palabras) sé que me recuerdas y me guardas contigo de la manera en que yo lo hago.

Por ahí guardo un cassette... tú tocabas la guitarra, y cantamos esta canción. No salió tan entonado -ojo, hicimos las dos voces-, pero quedó bastante lindo :)

Querido H: Ay mi querido HDP. El eterno amigo que se volvió el enamorado. El player que encontró al amor de su vida (osea yo) y colgó los chimpunes para ser el novio ejemplar. El que no se cansaba de llenarme de cartas, tarjetas, rosas, peluches, velas, para demostrarme cuánto me quería (y demostrárselos a las demás de paso, siempre escuchaba un: “ohhhh qué lindo!! Hizo eso por ti???”). No voy a negar que fuiste el único que experimentó a la Matilda romántica y soñadora. Claro, y a la Matilda virgen. No voy a negar tampoco que te amé con rabiosa locura, pero como te dije después: te amé como puede amar una chica de 17 años. Amé pensando que el amor lo puede todo, que si tú confiabas en mi, yo confiaría en ti aún más y por todo el resto de mi vida. Lástima que terminé pidiéndote más bien que jamás, en el resto de tu vida, me dirijas la palabra y te olvidaras de mi existencia. Contigo aprendí que habían consecuencias a las que no estaba preparada de enfrentar. Contigo aprendí también que una no puede pecar de ingenua, y que el tiempo cura. O mejor dicho, alivia. Veo ahora que paras encontrando a la mujer de tu vida y futura esposa cerca de 2 a 3 veces por año. Y me causa mucha gracia que ya a estas alturas sigas prometiendo cartas, tarjetas, rosas, peluches y velas a cada una de ellas.

Esta canción se volvió mi himno durante varios meses después de que terminamos. Hasta ahora es una de mis canciones preferidas y una de las clásicas cuando me voy a un karaoke. Aún me sale con bastante sentimiento cuando la canto.

http://www.youtube.com/watch?v=yJfsYBv9dnc

Querido S: ¿Cómo dos mejores amigos, de toda la vida, desde los 6 años, terminan juntándose en una cama? Simple: el aburrimiento y las ganas de defogue hormonal. ¿Cómo, si a pesar de que este encuentro no fue solo uno, sino varios, y casi todos decepcionantes… aún así haya sentido que podíamos volvernos novios? Caray S, has sido uno de los mejores cuerpos que he podido tocar (…mejor me guardo la acotación, mis mujercitas ya saben qué iba a decir, jaja) y el 99% de las veces no logré un orgasmo. ¿Cómo pudimos pensar que realmente podíamos ser algo juntos? ¿Cómo, después de varios años, retomamos la costumbre y volvimos esporádicamente a tener de nuevo este tipo de encuentros? ¿Cómo después de todo eso, me pediste intentarlo de nuevo, intentarlo en serio, y darnos la oportunidad anteriormente frustrada? Solo sé que, a pesar de tus niñerías y nuestra historia tan rara, te quiero como quiero a pocas personas en este mundo. Eres probablemente el único hombre que ha permanecido a mi lado, como amigo y/o como pseudoamante, y que permanecerá conmigo hasta el final de mis días. Serás el Tío S para mis hijos, seguramente te haré padrino de uno de ellos, y aun de viejos seguiré sintiéndome cómoda y protegida cada vez que me abrazas.

Después de que me dijiste que mejor sigamos como amigos, vi esta película y esta escena en especial me hizo moquear horripilantemente. Pensé que tendría que hacer lo mismo cuando te cases.

http://www.youtube.com/watch?v=BUSd5ldRI1U

(To be continued)

miércoles, 6 de mayo de 2009

Pensando en voz alta

Definitivamente no sé lidiar con el estrés.
Me vuelvo muy "alpinchista" y pachochuda, y se me pasa el tiempo pensando por donde empezar.

No sé cómo manejar tres trabajos a la vez, y no sé cómo haré de aqui a un mes cuando tenga solo uno o tal vez ninguno.

Pienso que ya no puedo amanecerme trabajando, mi cuerpo carga ahora medio... digo, un cuarto de siglo encima (mis mujercitas comprenden mis calculos matematicos inexactos) y me pide dormir. Me pide dormir desesperadamente.

Ya no es como antes en que me tomaba una media hora aproximadamente en recapitular y analizar mis pensamientos propios del dia a término echada en la cama, a oscuritas, y abrazando la almohada.
Ahora intento hacer eso, y de pronto despierto apurada para ir a la oficina.

Solamente llego a distraerme cuando veo y escucho las nuevas gracias de mi sobrina, cuando J me manda mensajitos pidiendome que ya me vaya a descansar y que deje de trabajar tanto, y cuando me llegan avisos al mail diciendo que mis mujercitas han posteado nuevas cosas por aqui.

Las extraño demasiado y necesito compartir con ustedes y escucharlas siempre.
Lo amo a pesar de mis dudas racionales y a pesar de nuestras mutuas incomprensiones.
La adoro cuando me llama por mi nombre en su idioma de bebé y cuando me señala la mejilla en donde quiere darme un beso.

Pero no tolero el estrés. Solo denme una cama y echémonos a dormir todas.

martes, 5 de mayo de 2009

No tengo tiempo

Desde que comenzamos este blog con mis queridas mujercitas he leído cada post publicado… habré comentado un par (exagerando) y siempre me quedo con la idea en la cabeza de lo que me gustaría compartir con ellas. Que sepan qué me pasa.. qué pienso… qué quiero…ya que la idea entiendo es mantenernos en contacto o informadas por decirlo de alguna manera y claro, también expresarnos. Como se darán cuenta, al final nunca logro escribir algo por la bendita frase de siempre: “no tengo tiempo”.

Qué tan difícil puede ser escribir lo que uno siente… decir lo que uno siente me parece difícil, un parto! En cambio, creo que escribirlo podría llegar a ser más sencillo, siempre vas a poder borrar una palabra, una frase, un párrafo completo, “ponerlo bonito” y si no te gusta nada: borrar TODO y volver a empezar. En cambio, cuando hablas…sí que es difícil decir “retiro lo dicho” o “lo que he querido decir es…” , sobre todo cuando se es tan cantinflas como yo hablando (y escribiendo). Y es que puedo ser muchas veces tan bruta hablando (por nervios generalmente, o roche de decir lo que siento) que termino diciendo una barbaridad o siendo muy cruda.

Este post lo comencé anoche, mientras esperaba a una amiga de la oficina que terminara sus cosas para que me jalara y lo curioso es que ya tenia como media página escrita sobre un personaje que ha tenido (o tiene? en mis líneas de ayer estaba tratando de descifrarlo) una participación importante en mi vida. En cambio hoy, a las 6.30 am que retomé la escritura (porque de todas maneras quiero publicar “algo”), leyendo lo que escribí anoche decidí cambiarlo un poco J

Bueno, se nota que en las letras no soy muy privilegiada como mis queridas mujercitas, así que sin importar hacer roche por lo simple, enredado o aburrido que pueda ser lo que escriba, me mandaré, pe!

A ver: “No tengo tiempo”. Cuántas veces me han escuchado decir esta frase como respuesta para TODO. No tengo tiempo para verlas, salir, hablar, escribir, y hasta sentir!. Pues, en estos últimos días me he puesto a pensar qué tan cierto puede ser?.

La verdad creo que muchas veces es mentira y ustedes lo saben. Mis mujercitas se preguntarán: por qué Lucía se ha puesto a pensar en esto, pues últimamente he sentido que he dejado que mi vida corra a mil y no lo digo solo por el trabajo, también los estudios, los nuevos amigos, los antiguos, la familia, y en verdad me he sentido bastante feliz.. Pero (como siempre hay un pero en todas las historiaa) mi corazón lo dejé de lado y eso de alguna manera ha hecho que sienta un pequeño vacío al punto tan es así que apenas tuve un ratito y puse “pausa” me vino “el bajón”.

Pero qué tanto de eso ha sido mi culpa? Pues casi todo, no? ya que eso de “no tengo tiempo de pensar si me gusta o no G” o qué quisiera que pasara con G o si objetivamente hablando me veo al lado de G (o el al mío) tal vez sea solo una mentira que me he repito (y que he repetido) todos los días para no permitir que lo que sienta aflore. Eso, mezclado con el perjuicio de siempre de “cómo es posible que a MI me guste un chico como G!” O de repente simplemente no siento nada y estoy tratando de sentir algo o aferrarme a esa idea de que siento algo por G sólo para llenar ese espacito vacío que mencioné. A ver…. cómo haríamos? Alguien sabe la respuesta? Sí: Lucía.

He leído el último post de Frankie y, como los demás post de mis mujercitas, me ha inspirado. Todas queremos tomar las riendas de nuestras vidas, pero a veces nos da miedo. Claro! Es tan cómodo que otro decida por uno, así siempre se tiene a quién echar la culpa, jeje.

He decidido no tener miedo a responderme: qué siento por G, porque después de tantos meses ya mucha cosa interesarme tanto en su vida y lo que pueda hacer o no. Como me dijo Rafaela, es mucha energía incurrida y todo eso por qué? Por necia? O en verdad sí siento algo por él?. O es sólo por el hecho de tener alguna emoción o entretenimiento en mi vida? Porque de alguna manera, así comenzó todo mi tema con G, una persona que apareció en mi vida en el momento preciso. Cuando más necesitaba él me ayudó –sin saberlo- a olvidar a L.

Y ahora, cuánto se demorará Lucía en saber qué siente por G? Mmmm, creo que si la pregunta es me gusta o no G, la respuesta es rápida y simple: Sí. Qué significa eso, las consecuencias y qué haré en base a ello? ay, no tengo tiempo de pensarlo ahorita :P

viernes, 1 de mayo de 2009

Perfectamente imperfecto

I es perfecto, pero también es imperfecto: tiene una sonrisa lindísima, pero al parecer, pueda que se ría más con la marihuana que conmigo; su cuerpo me encanta, pero tiene cientos de miles de tatuajes feos en él; es excelente en el sexo, pero es un pipiléptico declarado; le encanta cocinar, pero se lo ha tomado como una carrera, lo que lo ha llevado a las aulas sólo un par de semestres; podría ser una persona con la que me encantaría andar por el mundo, pero él ya tiene otra mujer en su vida, con la que pasará hasta el último de sus días: su hija de año y 8 meses.
Hoy recuerdo cómo escribí alguna vez que cada una de mis novias tenía algo que me completaba como ser humano, y que por eso la nuestra era una relación atípica, pero sinérgica. Hoy recuerdo cómo hablé de Mariana, y de su valentía para retar los convencionalismos sociales. Hoy me vi enfrentada conmigo misma y con los prejuicios que según yo, me eran ajenos. No sé si alguna vez llegue a existir algo con I, que pueda llamarse “serio”. No sé si alguna vez lo averigüe. Hoy he decidido eliminar la posibilidad de dejar pasar a la persona que puede hacer que los días y las noches sean mejores, sólo por mis prejuicios sobre el qué dirán, incluso de mi familia más cercana. Si no puedo o no me atrevo a vivir mi vida de la forma en que quiero y como me siento más contenta, entonces por qué puta razón la vivo?
Con mucha decisión, comenté el tema con mi madre, la persona a la que más amo en la vida, no por el tema "I", sino por comunicarle mi decisión de tomar las riendas de mi propia vida. Ella me entendió 1000 por ciento, sorprendiéndome gratamente...una vez más.
Pueda que me equivoque, pero el aprendizaje vicario no aplica a rajatabla, sólo para situaciones objetivas; y como dijo alguien alguna vez: si yo fuera objeto, sería objetiva; como soy sujeto, no puedo ser sino subjetiva.