lunes, 10 de junio de 2013

In your arms ♫

Aquí, de madrugada, tratando de terminar el trabajo pendiente, con la saturación mental a mil.
Tras varios meses de trabajo non stop, sin fines de semana, sin posibilidad de hacer mucho entre semana.
Sin verte a veces días, o verte pero con eventos de familiares/amistades de por medio que no nos permitían apachurrarnos, como bien lo necesitábamos.
En un contexto así, tener noches como la de ayer, es lo único que necesito.

Venir a verme pasada la medianoche, yo renegando por el frío y la lluvia y por salir a esa hora, tu pidiéndome que no me pelee por tonterías. Que lo más importante es estar juntos.
Dejar juntos tu carro en tu casa, esperar que te cambies el terno que te obligan a usar para tu maestría, mostrándome orgulloso que te habías puesto la corbata que te escogí (que juzgaste como metrosexual, pero que te diste cuenta que era muy linda).
Pedir el taxi para regresar juntos a mi casa, porque yo debía descansar en mi cama. Tenía que descansar bien porque tenía que despertar muy temprano hoy para trabajar.
Llegar juntos a mi casa, prender la tele un rato, empezar a ver una de esas series tontas que me gustan, y verte caer de sueño, de cansancio, en mi sillón. Y yo avisarte que ya mejor nos acostemos, y tu, que sabes que me gusta mucho esa serie tonta, me digas que no. Que esperabas ahi, que yo lo termine de ver.
Mirarte tratando de acompañarme en esa ridiculez, y yo apagar las luces, apagar la tele, y llevarte de la mano a mi cuarto.
Verte dormir, mientras yo juego en mi cel. Cel que me regalaste y que me hace pasar mejor las noches cuando estoy sola. Moverme un centímetro para acomodarme en la cama, y tu dormido te das cuenta, y me abrazas más fuerte, y me das un beso en el hombro a ojos cerrados.
Acomodar mi mano con la tuya, como siempre lo hago cuando te duermes primero.


Recordar la canción que te dediqué hace unos días.
Tararear mentalmente ese fondo musical hasta que venga el sueño.
Dormir a tu lado.



Nota: A la mañana siguiente, algo me moviste/hiciste que me hizo reaccionar en automático dormida y mandarte un lapo en medio de la cara, en medio de tu hermosa nariz. Jajaja, lo siento. Cuando ya estoy dormida, soy cero romance.